Video screenshots
Después que la lluvia del verano nos atrapó, finalmente encontramos calidez y pasión. El inesperado aguacero nos dejó empapados, pero tan pronto como nos secamos, las cosas se calentaron rápidamente. La intensidad del momento se apoderó, y hicimos el amor ferozmente, dejando que la energía de la tormenta alimente nuestro deseo. Fue una experiencia salvaje e inolvidable que nos acercó aún más.
Publicado por OneThelma